La Crisis de la Legislación sobre Armas en Chile: Una Perspectiva Crítica

En los últimos años, hemos observado una creciente falta de conocimiento respecto a las armas en manos de civiles, ya sea para deporte, caza, defensa personal o colección. Esta situación se agrava debido a la aplicación deficiente de una ley cargada de prejuicios y a la imposición de un reglamento excesivo que contribuye a una sensación de desorden sistemático.

Cada día parece que la pérdida de control aumenta. Según nuestra evaluación, esto se debe a la descoordinación entre los tres organismos encargados de administrar esta ley, quienes parecen no querer trabajar en conjunto.

Por un lado, tenemos a la Dirección General de Movilización Nacional (DGMN), bajo mando militar, que muestra un desconocimiento absoluto respecto a las armas en manos de civiles. No comprende el deporte, la caza, la colección ni la defensa personal. Esto se evidencia en el reglamento complementario de la Ley de Control de Armas, elaborado por la DGMN, que fija requisitos absurdos e inalcanzables, como campos de tiro de 300 metros para armas largas o la necesidad de contar con un vehículo para evacuar heridos en campos de tiro civiles, algo innecesario dado que no se registran heridos en estos lugares.

Además, la DGMN cuenta con personal civil en todos sus estamentos, pero sigue operando bajo una lógica militar, sin intercambio de experiencias y opiniones. Una parte importante de este personal civil son personal de las fuerzas armadas en retiro y muchos provienen del ámbito de inteligencia.

Por otro lado, las Autoridades Fiscalizadoras, a cargo de Carabineros, tienen su propia estructura jerárquica y dependen del Ministerio del Interior, lo que impide una coordinación efectiva con la DGMN. Esta falta de coordinación se convierte en un conflicto constante sobre quién tiene el control.

Finalmente, el Banco de Pruebas, definido como un organismo asesor con su propio mando militar, actúa de manera independiente, tomando decisiones y emite resoluciones más allá de sus atribuciones y capacidades, contribuyendo a la competencia mal entendida.

Todo esto hace imposible una coordinación y colaboración eficaz, dificultando la implementación de una política pública efectiva. Los casi 6 mil millones de pesos que ingresan anualmente por las tasas de derechos pagadas por los usuarios, se reparten entre la DGMN y las Autoridades Fiscalizadoras, pero no reflejan la calidad del servicio que recibimos. En la práctica, el servicio es mediocre y deficiente.

La falta de control, los malos índices de fiscalización y las evaluaciones negativas de los usuarios indican que algo no funciona bien. La DGMN, que depende de la Subsecretaría para las Fuerzas Armadas del Ministerio de Defensa Nacional, debería ser fiscalizada y corregida por esta Subsecretaría. Sin embargo, hay descontrol y deficiente fiscalización, ya que la Subsecretaría parece preferir omitir antes que intervenir y controlar a la DGMN. El Ministerio de Defensa Nacional, por su parte, no tiene injerencia en las Autoridades Fiscalizadoras, que dependen de Carabineros y del Ministerio del Interior, creando una estructura descontrolada.

Cuando la Contraloría General de la República emite informes señalando irregularidades que constituyen delitos, la DGMN responde con sumarios administrativos en lugar de denunciar estos delitos al Ministerio Público, como establece el Código Procesal Penal. Hasta ahora, la DGMN no ha presentado una sola denuncia a la justicia, incumpliendo con su deber y cometiendo delitos al no hacerlo.

Debemos ser justos y reconocer dos aspectos. Primero, el director de la DGMN, proveniente del ámbito militar, no está en su medio natural y se ve influenciado por asesores que lo inducen a error. Segundo, aunque la DGMN ejerce la supervigilancia según la ley, no son ellos quienes inscriben las armas, sino las Autoridades Fiscalizadoras en manos de Carabineros.

Mientras tanto, se habla de descontrol de armas en Chile y se culpa a los propietarios legales, aunque sabemos que es imposible que alguien con antecedentes penales inscriba un arma sin la complicidad de algún funcionario público. Este diálogo de sordos permite que los delincuentes inscriban armas, que los certificados médicos sean emitidos por psiquiatras fallecidos y que el crimen organizado infiltre las estructuras del Estado.

Cristian Gamboa Beltramín, Presidente ANTRA Chile




John Lott en Chile: “Los más perjudicados con el control de armas son los más vulnerables”

La visita de John Lott a Chile, organizada por ANTRA, FECHITIDE y AGAPECH, resulta una muy buena noticia para el nivel del debate sobre el desarme que se produce en Chile. Entre muchas lecciones que dejó, Lott, quizás el mayor experto mundial sobre el fenómeno de las armas de fuego en manos de civiles, dejó una en particular que puede cambiar la óptica en torno a la discusión que se da en todo el cono sur sobre el acceso a éstas.

Según Lott, quien fue asesor del departamento de Estado estadounidense durante la administración de Trump y que viene de asesorar al gobierno ecuatoriano por la crisis de seguridad que afecta a ese país, los más perjudicados cuando las restricciones al derecho a la defensa se aplican en los países son precisamente las personas más vulnerables, y mencionó a las mujeres, las personas mayores y las personas socioeconómicamente más deprivadas.

La conclusión del autor de “Más Armas, Menos Crimen” y “Mitos sobre el control de armas de fuego”, se basa en más de tres décadas de investigaciones propias tanto en Estados Unidos como en el resto de los países del mundo y datos recopilados a través de más de un siglo de registros en torno a la prohibición de armas.

Respecto del caso chileno, Lott destacó que “cuando los carteles de la droga detectan debilidad en un país para combatir el crimen, es precisamente dónde instalan sus principales centros de operación”. El economista advirtió que estamos al principio de un camino que será difícil de abandonar, una vez que el crimen organizado consolide su influencia en nuestro país.

Como recomendación, el académico de renombre mundial, sugirió poner el énfasis de los esfuerzos por revertir la agenda anti armas no en los números, sino en el accionar de la delincuencia. Al respecto el Dr. John Lott extendió el desafío de encontrar un solo país en el mundo en el que las tasas de homicidio y delincuencia se hayan reducido luego de aplicar prohibiciones a las armas de fuego y a las personas observantes de la Ley para usarlas de manera autónoma en la defensa de sus vidas y propiedad.




MAS ARMAS, MENOS CRIMEN

El Dr. John R. Lott, Jr. es economista y un experto mundialmente reconocido en armas y crimen. Fue Asesor Principal de Investigación y Estadísticas del Departamento de Justicia de Estados Unidos. Lott ha ocupado puestos de investigación o docencia en varias instituciones académicas, incluidas la Universidad de Chicago, la Universidad de Yale, la Escuela Wharton de la Universidad de Pensilvania, la Universidad de Stanford, la UCLA y la Universidad Rice, y fue economista jefe de la Comisión de Sentencias de los Estados Unidos durante 1988-1989.

Posee un doctorado. en economía de UCLA. El premio Nobel Milton Friedman señaló: “John Lott tiene pocos iguales como analista perspicaz de cuestiones controvertidas de política pública”. Lott es un prolífico autor de publicaciones tanto académicas como populares. Ha publicado más de 100 artículos en revistas académicas revisadas por pares y ha escrito nueve libros, entre ellos “Más armas menos crimen”, “El sesgo contra las armas” y “Freedomnomics”. Sus libros más recientes son “Dumbing Down the Courts: Cómo la política mantiene a los jueces más inteligentes fuera del estrado” y “La guerra contra las armas”. Ha sido uno de los economistas más productivos y citados del mundo (entre 1969 y 2000 ocupó el puesto 26 a nivel mundial en términos de producción total de revistas académicas ajustadas por calidad, el 4º en términos de producción total de investigación y el 86 en términos de citas). Entre los profesores de economía, negocios y derecho, su investigación ocupa actualmente el puesto 24 entre las más descargadas del mundo. También es un escritor frecuente de artículos de opinión.

Lott es el fundador y presidente del Centro de Investigación para la Prevención del Delito, CPRC, por sus siglas en ingles. El CPRC se caracteriza por no aceptar donaciones de fabricantes o comerciantes de armas, ni de antiarmas, tampoco acepta donaciones de organizaciones involucradas en el debate sobre inmigración ilegal. El centro realiza y publica investigaciones de calidad académica sobre la relación entre las leyes que regulan la propiedad o el uso de armas, el crimen y la seguridad pública. Durante años ha puesto su investigación y los datos a disposición de los investigadores, el público, los formuladores de políticas y los periodistas.

Lott al poseer una visión académica y fundamentada en años de investigación puede aportar a la discusión de políticas públicas y definición de estrategias anti delincuencia.

El jueves por la noche el doctor Lott dictó una conferencia en Santiago. Les dejamos aquí la presentación que se utilizó en esta conferencia.




La Memoria Muscular En El Tiro

En el ámbito de la seguridad más precisamente cuando nos enfocamos en entrenamientos tácticos y defensivos muchas veces escuchamos hablar de lo que denominamos tiro de combate, tiro policial y tiro defensivo, que desde mi opinión personal cada una de estas especialidades son “disciplinas” especializadas, que requieren habilidades avanzadas y una formación específica para enfrentar situaciones de alto riesgo de forma eficaz y así garantizar la seguridad personal y la de terceros.

Pero, ¿Cuándo hablamos de habilidades a que hacemos referencia precisamente?

En el ámbito de los entrenamientos de tácticas y técnicas en el uso de armas de fuego destinadas a las distintas “disciplinas”, hacemos referencia a habilidades cuando hablamos de un manejo eficiente de:

  • Formación de Patrones Motores Específicos (tácticas y técnicas):

La creación de patrones motores específicos es esencial. La memoria muscular se activa a medida que los tiradores practican la postura, la empuñadura y la técnica de disparo una y otra vez. La consistencia en estos movimientos fortalece la memoria muscular, permitiendo a los tiradores replicar con precisión sus acciones en cada disparo.

  • Desarrollo de la Precisión y la Consistencia:

La memoria muscular es la clave para lograr disparos precisos y consistentes. A través de la repetición, los tiradores mejoran la coordinación entre la vista, la postura y la manipulación del arma. Esta mejora en la precisión se traduce en un rendimiento más constante en entrenamientos.

  • Control de la Respiración y Ritmo Cardíaco:

La memoria muscular en el tiro va más allá de los movimientos físicos. También abarca el control de la respiración y el ritmo cardíaco. Los tiradores aprenden a sincronizar estos aspectos con la acción de disparo, optimizando así su estabilidad y puntería.

  • Entrenamiento Mental:

El entrenamiento en tiro incluye estrategias para manejar el estrés y desarrollar resiliencia mental. Los tiradores aprenden a mantener la calma en situaciones intensas y a recuperarse rápidamente después de enfrentar eventos traumáticos.

Antes de seguir con este artículo hay que hacer hincapié en dos puntos fundamentales.

El primero es aclarar que todo lo redactado en este artículo y desde mi experiencia personal, la memoria muscular va a incrementar las probabilidades de poder reaccionar de una manera “eficaz” frente a situaciones críticas, pero no nos garantiza absolutamente nada, ya que como sabemos, estamos hablando del cuerpo humano y este en algunas situaciones puede ser impredecible.

El segundo punto es que esto es parte de un todo en donde se complementa con otros aspectos como, por ejemplo: Conciencia Situacional, Formación Especializada, Trabajo en Equipo y Comunicación, equipamiento, entre otros.

Ahora bien ¿Qué es la memoria muscular? Y ¿Qué rol cumple en el tiro?

La memoria muscular, es un fenómeno fascinante que impulsa la capacidad del cuerpo para recordar y ejecutar movimientos específicos. Este tipo de memoria desencadena la capacidad de realizar tareas físicas de manera más eficiente a medida que se practican repetidamente.

La memoria muscular desempeña un papel crucial, permitiendo a los tiradores perfeccionar sus habilidades a través de la repetición y la práctica constante.

¿Como podemos lograr una genuina memoria muscular?

  1. Proceso de Formación de Memoria Muscular:

La memoria muscular se crea a través de la repetición constante de movimientos específicos. Cuando realizamos una acción una y otra vez, el cerebro forma conexiones neuronales que fortalecen la secuencia de movimientos y la almacenan en la memoria a largo plazo.

Es primordial recalcar que debemos en primera instancia perfeccionar la técnica ya que nuestro cerebro va a alojar secuencia de movimientos y si nosotros realizamos erróneamente la técnica lograremos “malos hábitos”, es por esto que es fundamental primero perfeccionar la técnica y luego en forma progresiva incorporarle velocidad y estrés.

  1. Rol de las Neuronas Espejo:

Es aquí donde el rol del instructor o educador juega un rol fundamental a la hora de transmitir las técnicas y tácticas ya que las neuronas espejo desempeñan un papel crucial en la memoria muscular. Estas neuronas se activan tanto cuando ejecutamos un movimiento como cuando observamos a otra persona realizar la misma acción. Esta capacidad de imitación y emulación contribuye significativamente a la formación de la memoria muscular.

  1. Importancia del Entrenamiento Repetitivo:

Aquí es donde ingresa la disciplina que debe tener el operador de un entrenamiento constante y repetitivo ya que es fundamental para desarrollar y mejorar la memoria muscular ya que el cuerpo perfecciona la ejecución de movimientos, lo que resulta en una mayor eficiencia y precisión.

  1. Desarrollo de la Conciencia Corporal:

La memoria muscular está estrechamente relacionada con la conciencia corporal. A medida que se perfecciona una habilidad, la persona desarrolla una mayor sensibilidad y conocimiento sobre su propio cuerpo, mejorando así la coordinación y el control.

Matías Antequera

Recordemos que, frente a situaciones críticas, el cuerpo humano comienza a liberar adrenalina la cual desencadena un complejo proceso instantáneo en donde nuestro cuerpo empieza a perder la sensibilidad de las habilidades motoras finas (necesarias para una manipulación efectiva del arma de fuego) incrementando en el mismo instante las habilidades motoras gruesas, para así despertar el instinto de supervivencia que puede resultar en tres diferentes situaciones, enfrentar la amenaza – huir – paralizarse.

En resumen y debido a que tanto el tiro de combate, como el tiro policial y el tiro defensivo son disciplinas especializadas que van más allá de las habilidades básicas de manejo de armas y es más que simplemente aprender a disparar un arma de fuego. Es que requieren una combinación única de habilidades técnicas, tácticas avanzadas, control motor fino, trabajo en equipo y una sólida base ética.

Es por esto que la formación integral en estas áreas es esencial para garantizar el éxito y la seguridad en situaciones críticas. Ya que se requiere una combinación de habilidades físicas y mentales, en este contexto, la memoria muscular desempeña un papel crucial, permitiendo a los tiradores perfeccionar sus habilidades. Comprender su función y cómo se forma puede ser beneficioso para aquellos que buscan mejorar sus habilidades, junto con un profundo conocimiento de las leyes y ética asociadas. La formación adecuada y el enfoque en la conciencia situacional son esenciales para aquellos que buscan integrar estas disciplinas como parte de su estrategia de autoprotección.

(*) Matías Antequera es Contratista & Consultor en Seguridad, Instructor de Tiro (ITB ANMAC 6787), Socio Gerente y DT C.E.S.E. Security S.A.S. y Ex Sub. de Gendarmería Nacional Argentina.




David contra Goliat

A fines de enero de este año 2024, presentamos cerca de 60 recursos de amparo y/o protección en Cortes de Apelaciones de todo el país, el objetivo era detener la aplicación del Reglamento Complementario de la Ley de Control de Armas, todos los recursos fueron presentados contra el Presidente de la República, Gabriel Boric Font.

Sólo cuatro fueron aceptados en la Corte de Apelaciones de Concepción, que solicitó informe a la Ministra de Defensa y luego señalo que le correspondía ver esta causa a la Corte de Apelaciones de Santiago, ya que el recurrido era el Presidente de la República con domicilio en esa ciudad.

La Corte de Apelaciones de Santiago se declaró incompetente y señalo que al haber encargado una diligencia y ya que el recurrente alegaba que la violación de derechos constitucionales habría ocurrido en Concepción, le correspondía a la Corte de Apelaciones de Concepción verlo. Se provocó entonces una contienda de competencia y fue a la Corte Suprema la que resolvió el 8 de abril que debía verlo la Corte de Apelaciones de Concepción.

El 10 de abril la Corte de Apelaciones de Concepción resuelve:

El 24 de abril el Presidente de la República, la ministra de Interior y la ministra de Defensa ingresaron un escrito solicitando una ampliación del plazo y acumular todas las causas en una sola. El 7 de mayo ingresaron una segunda solicitud de ampliación de plazo y la Corte de Apelaciones de Concepción lo otorgó, pero señalo que era la última vez y de no presentarlo resolverían sin ese informe.

Recién el 20 de mayo, dos días después de vencido el plazo, el presidente Boric, la ministra Tohá y la ministra Fernández ingresaron un informe de 69 páginas con una serie de argumentos que en resumen buscan desvirtuar nuestra presentación.

El 24 de mayo se hizo parte de la causa el Consejo de Defensa del Estado.

Con esto sólo debíamos esperar que se nos pusiera en tabla para que se vieran los recursos acumulados por parte de una de las salas de la Corte de Apelaciones de Concepción. Esto sucedió el mismo viernes 24 de mayo y se puso en tabla para hoy martes 28 en la Primera Sala. Solicitamos suspensión para otra fecha y se otorgó ayer lunes.

Ha sido un camino más largo de lo que esperábamos, pero estamos confiados en que hasta el momento hemos obtenido pequeños y significativos triunfos:

  1. Hemos logrado que una Corte de Apelaciones acogiera 4 recursos de protección, lo que implica que al menos consideran posible que efectivamente se vulnerarán derechos constitucionales con la promulgación del Reglamento Complementario de la Ley de Control de Armas.
  2. El presidente Boric ha sido requerido por el Poder Judicial para que informará sobre el contenido de los recursos.
  3. Los escritos ingresados por parte del gobierno fueron firmados por el presidente y dos ministras de estado, algo muy poco frecuente.
  4. El gobierno tuvo que pedir ampliación de plazo en dos ocasiones, lo que demostró incomodidad y falta de preparación para enfrentar una situación que nunca pensaron se produciría.
  5. El informe entregado por el gobierno es una radiografía exacta de lo que piensa el Estado de Chile, los cuerpos legales en que basan sus argumentos y lo que fundamenta su ideología anti armas. Hoy sabemos como piensan y en que se basan y podemos establecer que esto es una política del Estado de Chile y no del gobierno de turno.

Somos “David contra Goliat”, una pelea absolutamente desigual en que nos enfrentamos a un ejército de abogados, al Consejo de Defensa del Estado y la infinita billetera del Estado de Chile. Pero sabemos que tenemos la razón, tenemos la decisión e infinita convicción que durante años nos ha guiado en esta desigual lucha por nuestros derechos.

Esta es una de muchas etapas en nuestra cruzada, en la que hemos logrado posicionar el tema, hemos instalado la inquietud en los legisladores que han ido comprendiendo que el problema no son nuestras armas, sino las ilegales y que nosotros no surtimos el mercado ilegal. Sistemáticamente hemos ido venciendo etapas, poniendo banderas, convenciendo escépticos, derrumbando mitos y falsos argumentos. Hemos logrado identificar sus paradigmas para poder centrar el debate y construir una plataforma de argumentos serios e irrefutables.

Pero lo principal es que hemos podido construir redes de apoyo, construir un camino común junto a otras organizaciones, como la Federación Chilena de Tiro Deportivo, FECHITIDE; la Asociación Gremial de Armerías, AGAPECH; la Asociación de Armeros de Oficio; la Agrupación de Coleccionistas de Armas de Fuego y otras organizaciones gremiales y deportivas. Con ellas hemos constituido la Coalición por armas Legales y le hemos dado más fuerza a David para enfrentar a Goliat.

Hoy estamos en una campaña de reunir fondos para enfrentar esta defensa ante la Corte de Apelaciones de Concepción, debemos pagar abogados y viajes a Concepción. Las audiencias online ya no están en práctica, aunque el abogado del Consejo de Defensa del Estado solicito alegar vía zoom, pero la CA aun no le responde.

Entre algunos asociados de ANTRA ya hemos reunidos una parte de esos fondos, lo necesario para pagar el 50% de los honorarios de los abogados, pero aun nos falta el 50% restante y los necesario para los viajes y estadía en concepción. Necesitamos de su ayuda y apoyo para reunir lo que falta y así poder defender estos recursos judiciales.

Les solicitamos su aporte, para poder continuar esta lucha y dar otro paso más junto a todos los que ya hemos dado por más de 16 años.

Pueden hacer su aporte en el siguiente enlace:

https://www.flow.cl/btn.php?token=31bkabg

O por medio de este QR:

Iremos actualizando el desarrollo de los alegatos en nuestras RRSS.

¡¡Muchas gracias!!

Cristian Gamboa Beltramín
Presidente
Asociación Nacional por la Tenenecia responsable de Armas
ANTRA Chile




REUNIÓN DGMN

Hoy hemos tenido una reunión con el director de la DGMN y su equipo asesor para conversar temas que hoy nos perjudican en la aplicación del reglamento complementario. Le expusimos los casos de usuarios a lo largo del país que reflejan no sólo la disparidad de criterios, sino la creación imaginativa de normas, plazos y requisitos que no existen en ninguna parte.

Conversamos por más de 2 horas, le relatamos casos concretos y le expusimos nuestras preocupaciones, pero también le hablamos de nuestra propuestas y de nuestra disposición a ayudar en la implementación de un reglamento que, desde nuestra perspectiva, siempre adoleció de problemas.

Se explico porque nuestro “tiro deportivo” es tan diferente al tiro institucional militar, se habló de los campos de tiro deportivos, de la tradición de sus costumbres, y de las limitaciones absurdas que nos han colocado con esta legislación y de cómo proponemos implementar y ejercer un control eficaz y eficiente, pero que no abuse y pase a llevar a los legítimos dueños de armas de fuego, así como a los clubes deportivos, los cazadores y coleccionistas.

Tenemos mucho trabajo por delante, hay que sistematizar mucha información para poder ir buscando soluciones reales.

Le hicimos ver claramente nuestras reservas y aprehensiones respecto al Reglamento complementario y especialmente sobre quienes participaron de su redacción, de sus actitudes pocos respetuosas de los acuerdos que en aquella oportunidad habíamos adquirido.

A la hora de hacer el balance, debemos señalar sin duda alguna que fue positivo y porque no, también prometedor. Pero hay mucho trabajo que hacer.

Es esencial que cuando cada uno de los usuarios de la ley tenga un problema o se le impida efectuar un trámite, se nos informe, con un relato de lo que sucedió, identificando quien y en que AF fue el problema. Cada una de estos eventos serán comunicados por nosotros al director vía OIRS, pero también por vía directa al director. Esta es la única manera de detectar y excplicitar los problemas. indentificar los puntos criticos y comenzar a solucionarlos.

Como primer paso acordamos cooperar en la redacción de un Manual de Procedimientos, que nos permita transparentar la implementación de este Reglamento.

De nosotros depende en gran medida esta primera etapa.




MAL DISEÑO, PÉSIMA IMPLEMENTACIÓN

Cuando revisamos las versiones preliminares del Reglamento Complementario, a inicios del 2023, comprendimos dos cosas:

  1. Aquí se cristalizaba el discurso de un funcionario de la DGMN que durante años habíamos escuchado y que se resumía en que hay que evitar las armas en manos de civiles, hay que restringirlos hasta extinguirlos.
  2. Era evidente que muchas de las medidas propuestas no serían fáciles de implementar y la historia y la conducta de la DGMN indicaban que no podrían hacerlo.

Y aquí estamos, prácticamente en el mes de mayo de 2024, y nuevamente fallando en:

Los usuarios no han podido cumplir con el registro de sus dispositivos de puntería tal como señala el Capitulo X del Reglamento Complementario que en su único articulo señala:

Artículo 175.- La instalación de sistemas especiales de puntería en cualquiera tipo de arma de fuego, sin la autorización de la DGMN, la constituye en un arma de fuego prohibida, en los términos de la letra g) del artículo 3 de la ley N° 17.798.

El citado articulo de la ley se refiere a armas, artefactos y municiones de posesión prohibida y el literal g) específicamente señala que son de posesión prohibida los siguiente:

g)    Ametralladoras y subametralladoras, metralletas o cualquiera otra arma automática o semiautomática de mayor poder destructor o efectividad, sea por su potencia, por el calibre de sus proyectiles o por sus dispositivos de puntería.

Los usuarios, que por cientos han concurrido a las AAFF de todo el país, se han visto imposibilitados de registrar sus dispositivos de puntería. La respuesta es siempre la misma, “no tenemos como hacer el registro en la base de datos de la DGMN”. Hoy no es posible cumplir el artículo 175 del Reglamento Complementario porque la autoridad encargada de implementar su cumplimiento y que además fue la que propuso -sin fundamento alguno- este artículo, aún no es capaz de hacerlo.

Clubes y federaciones no se han registrado, a pesar que por décadas han sido reconocidos por la DGMN. Cada vez que entregábamos un certificado con el que los deportistas obtenían permisos de transporte o inscribían armas para deporte, las AAFF los aceptaban como válidos y cuando tenían dudas se comunicaban con los presidentes de las federaciones para verificar autenticidad. Es decir, por décadas se ha reconocido la existencia de federaciones y sus clubes afiliados, pero hoy quieren que los clubes y las federaciones se registren y por supuesto paguen una tasa de derecho. Incluso señalan en el artículo 98 del Reglamento Complementario que en caso de no aprobarse esta inscripción no podrán funcionar.

“Después de verificar la información aportada y el cumplimiento de las medidas de seguridad, de constatarse su suficiencia, la A.F. remitirá por medios electrónicos los antecedentes a la DGMN para que ésta realice las inscripciones solicitadas. En caso contrario la solicitud será rechazada y la entidad solicitante no podrá funcionar como tal.”

Pero el módulo para que esta inscripción o registro se efectué aún no está implementado en la base de datos registral de la DGMN, y las AAFF están imposibilitadas de hacerlo. Nuevamente el mismo servicio público que diseño y redacto una norma, a nuestro parecer inútil y sin sentido, no ha podido implementar los requerimientos para su cumplimiento.

Las municipalidades han dicho que no pueden entregarle patente a clubes, porque son entidades sin fines de lucro y la ley de Rentas Municipales las exime de patente comercial. Algo que señalamos en su momento y hace muchos años atrás se lo planteamos como una ilegalidad a la DGMN, pero nuevamente la tozudez y el desconocimiento del mismo funcionario de siempre lograron inducir a este error.

Aún se está desarrollando el proceso de acreditación ante la DGMN de los instructores que darán los cursos de acreditación para los usuarios de la Ley. Luego deberán presentar sus antecedentes antes las AAFF de sus domicilios, para que sean revisados por estas, aprobados, registrados y habilitados como instructores.

No se ha comenzado con la acreditación de las personas jurídicas comerciales que implementarán estos cursos de acreditación, además deberán tener armas inscritas y sus respectivas municiones a nombre de la persona jurídica comercial. Estas empresas podrán ser constituidas especialmente para estos fines, o bien podrán ser clubes de tiro o federaciones que se registren, inscriban armas y se hagan consumidores habituales de munición y luego implementen estos cursos con los instructores que hoy están en proceso de acreditación. Nuestra propuesta siempre fue que los instructores debieran ser reconocidos y acreditados por los clubes y las federaciones y estas instituciones encargarse de impartir estos cursos, nuestra propuesta de siempre fue que se les entregara esta labor a las entidades deportivas. Ambos entes, son los que más saben de armas de fuego en manos de civiles, sus normas de seguridad y su uso eficiente. Pero nos ignoraron, ellos eran dueños de la verdad. Ni siquiera se ha comenzado con el proceso de inspección y acreditación de los campos de tiro, para que estas capacitaciones se puedan realizar, y todo esto debe estar listo antes del 1 de julio de este año, que es la fecha de entrada en vigencia de esta parte de la norma. Es evidente que no alcanzarán y si lo hacen permítanos dudar de la acuciosidad con que se efectuarán estas acreditaciones.

Dictaron normas para los campos de tiro desde la perspectiva del tiro militar. Siempre señalamos que las normas que proponían para regir los campos de tiro eran equivocadas, que imponían un enfoque militar -copiadas de un extemporáneo e inaplicable decreto N°50 y de la ANMaC Argentina-. El tiro deportivo es una actividad que por décadas ha sido desarrollada de manera segura y libre de accidentes por parte de clubes deportivos reconocidos y conformados de acuerdo a la Ley 19.712 o Ley del Deporte y que hoy si no se registran ante la DGMN estarían impedidos de funcionar. Pero adivinen, no nos escucharon porque ellos sabían de armas.

Sólo en estos aspectos ya el atraso es impresentable y permítannos decir que además la seriedad y eficiencia son cuestionables, hasta el momento no hay atisbo de una Manual de Procedimientos que nos permita a las AAFF y a nosotros tener claridad sobre cómo se aplica este reglamento, de manera que la AF de Arica y la AF de Castro apliquen los mismos procedimientos.

No puede ser una justificación para esto la falta de recursos, los usuarios de esta ley pagamos en tasas de derechos entre 5 mil y 6 mil millones de pesos anuales a la DGMN, dineros que según la Ley deben ser invertidos en la propia ley. Claramente quienes a diario asistimos a efectuar trámites en las AAFF y en la DGMN, no vemos esa inversión por ningún lado.

Algo no huele bien en este asunto, engañaron, escondieron la pelota, ignoraron recomendaciones y aprobaron entre gallos y media noche un reglamento que hasta el cansancio les señalamos que era impracticable. Durante meses les hicimos ver cada uno de los artículos con problemas, las disposiciones impracticables y las ilegalidades de un reglamento inútil e inaplicable. Pero insistieron, siguieron adelante hasta que forzaron su aprobación, el último día del ejercicio del contralor Bermúdez, tema que está siendo cuestionado por este ente.

Hoy la confusión es total, las AAFF son “el pato de la boda” y junto a la DGMN se culpan mutuamente de un desacierto tras otro.

Mientras todo esto sucede, las armas en manos de delincuentes siguen ahí y nadie hace nada por quitárselas o al menos por evitar que les lleguen nuevas armas por nuestras fronteras inseguras y permeables.

Hoy, gracias a nuestra legislación, los ciudadanos enfrentamos en nuestras casas y en la calle a delincuentes armados y lo hacemos a mano limpia, sin armas y ni hablar de portarlas para defendernos de un portonazo, un asalto o una encerrona. Todo gracias a que un señor que, enquistado por décadas en la DGMN, determinó que las armas legales en manos de ciudadanos honestos eran un peligro y durante años ha vendido ese discurso a sus jefaturas y a los gobiernos de turno. Desgraciadamente en los últimos años lo han escuchado y su discurso irracional resulto ser funcional a los anti-armas. Como resultado, hoy la mayor agencia anti-armas del país es la propia repartición pública que está encargada de llevar el registro de las armas legales en Chile.

Esta agencia, dependiente del ministerio de Defensa, hoy no rinde los 5 o 6 mil millones de pesos que recauda en tasas de derechos al año, la misma que cada 6 meses incrementa los valores e inventa nuevos ítems para cobrar tasas de derechos. Calculamos que estos nuevos ítems podrían significar un incremento del 35 al 40% en los ingresos de la DGMN por tasas de derechos de la Ley 17.798 de Control de Armas y Explosivos.

Un sin sentido más, en una interminable lista de desaciertos.

Cristian Gamboa Beltramín
Presidente ANTRA Chile
www.antra.cl



MALAS PRÁCTICAS

El pasado 10 de abril se publicó en la web de mega noticias una nota sobre la detención de un deportista de Valdivia, el motivo la compra e internación de una mira telescópica de visión nocturna y térmica. Esto fue el 15 de enero de este año, por lo que el dispositivo fue comprado antes de la publicación del reglamento Complementario de la Ley de control de Armas que las prohibía, al menos cuando estuvieran montadas en un arma de fuego.

Pero lo que llama la atención no es la mira, su procedencia o su uso, que aun esta por demostrarse que era para un arma de fuego, sino que el periodista tuviera antecedentes de una causa que está en estado de sumario investigativo, es decir, que está en calidad de secreto o reservado y sin acceso, solo las partes afectadas, el ministerio público a través del fiscal y el abogado defensor. Lo señalado por el periodista sólo podría ser conocido por algunas de las partes implicadas, no por él. Claramente aquí alguien filtro información y no fue desde la defensa, ya que el articulo intenta perjudicar al afectado e inmolarlo en la plaza pública, mucho antes de que se determine incluso si hay razones para un juicio.

Esta práctica de filtrar información a los periodistas es antigua y desgraciadamente habitual. Suponemos que se busca con esto crear conmoción y alteración en la opinión pública, quizás con el fin de influir en el desarrollo del proceso judicial. Especialmente cuando se carece de argumentos, pruebas y antecedentes para probar la culpabilidad o efectiva participación en un delito.

Aquí se pretende que la opinión pública condene a los acusados antes que la justicia se pronuncie, una práctica habitual que pareciera a nadie llamarle la atención. En este, y en muchos otros casos, debiese haber sumarios que determinen quien filtro la información y se sancione estas claras faltas al debido proceso. Pero esta clásica manera de hacer las cosas de manera torpe, impune y al borde de lo delictual ya es una costumbre y pareciera no importarles a las instituciones que sufren estas filtraciones.

Queda claro que el periodista hablo con algún fiscal que le aseguro que la trazabilidad de las armas en Chile es inexistente, cosa que además de ser alevosamente falsa, demuestra el completo desconocimiento que se posee del sistema de control de armas chileno.

Cada vez que un arma ingresa al país en una importación, se registra en la base de datos de la DGMN que autoriza la importación y luego la internación al país. Sin esto el arma no es ingresada, autorizada la importación y la internación se registra en la base de datos el país de procedencia, las vías de transporte, las fechas de compra, embarque y llegada; los datos del importador, donde las almacena, marca, modelo, serie y accesorios. Cuando el importador las vende a comerciantes o distribuidores que están autorizados por la DGMN, se registra la fecha, cantidad, marca modelo, número de serie y lugar de almacenamiento autorizado para el comerciante o distribuidor. Cuando un ciudadano la compra, debe estar acreditado ante la DGMN, que sabe su domicilio, antecedentes, ingresos económicos y antecedentes de sus familiares, además, se establece su nivel de conocimiento de legislación y armas. Luego de todo esto el arma es inscrita a nombre del ciudadano y el arma con marca, modelo, número de serie y accesorios, queda registrada a su nombre. Se puede establecer cuanta munición y donde la compro, se registra si luego la vendió, a quien, cuando y se acredita y guardan los antecedentes del nuevo comprado.

Entonces, no puede cualquier ignaro asegurar que el sistema de seguimiento de las armas en chile no existe. Muy por el contrario, es uno de los más estrictos de la región y del mundo.

El mencionado artículo tenía la pura y transparente intención de perjudicar a un ciudadano que está siendo investigado, que no ha sido sometido a proceso y que ciertamente es un conocido empresario y deportista de la región. Incluso se mencionan organismos públicos que le adjudicarían licitaciones y trabajos del rubro de la empresa del afectado.

Algo huele mal entre los autores de la nota y su fuente de información, que claramente busca figuración, por eso actuó como lo hizo al detener y allanar la casa de este deportista y cazador, cuando funcionarios de la PDI se hicieron pasar por empleados de correos para entregarle la mira que había comprado y de la cual posee factura y pago los derechos de aduana que correspondían. Lo demás luces de colores, pirotecnia en búsqueda de fama.

Mientras todo esto sucede, delincuentes siguen caminando armados por las calles, personas siguen siendo asesinadas con armas ilegales, las armas siguen ingresando por pasos no autorizados o en container que nunca serán revisados. Pero las instituciones quieren proyectar la sensación de que se hace algo cuando en la práctica no hacen absolutamente nada.

Un circo en el que hay señores corales, trapecistas, animales y muchos, muchos payasos.




EL GENERAL EN SU LABERINTO

El 21 de marzo del presente año ingresamos un reclamo en la OIRS de la Dirección General de Movilización Nacional -DGMN- y le enviamos un correo al director general de este organismo.

Básicamente le exponíamos de cobros indebidos realizados en la Autoridad Fiscalizadora -AF- de Castro que afectaron a uno de nuestros asociados. Pueden encontrar el detalle aquí.

El director nos respondió, señalando que lo analizarían para responder adecuadamente. Esta respuesta llego el viernes 5 de abril, ya la rapidez en responder es un muy buen antecedente. Otras administraciones de la DGMN, se tomaban el plazo máximo para responder y habitualmente, además, pedían postergación de este. Esta vez no fue así.

La respuesta es más que satisfactoria, el afectado debe señalar una cuenta bancaria para que se le devuelva el dinero mal cobrado y luego de eso podrá volver a efectuar el trámite para que se le respeten los plazos del permiso de transporte. Además, se efectuó una auditoria en la AF de Castro, según nos informaron nuestros asociados.

Sin duda alguna la impronta del director general, Jorge Hinojosa Riquelme, es notable. Cuando asumió el cargo y nos reunimos, nuestra preocupación se enmarco en dos aspectos. Por un lado, el Reglamento Complementario, sobre el que ya estaba en marcha desde muchos meses antes y sobre el que claramente no tuvo injerencia y el otro aspecto fue la calificación de meros tenedores de armas, que se explicitó con el cambio de la denominación de propietario en los padrones de las armas. En esa ocasión el director general se comprometió a solucionar lo de los padrones y así lo hizo en un plazo muy breve.

Desgraciadamente creemos que en esta tarea de “hacer las cosas bien” el general esta un tanto solo. Lo rodea un equipo que no sólo gestó uno de los reglamentos más restrictivos, inútiles y desarmista de las últimas 5 décadas, sino que además un equipo que insiste en faltar a la legislación y entregar directrices confusas y autoritarias a las Autoridades Fiscalizadoras -AAFF-.

En este escenario a nadie le parece raro que en la AF de Iquique se le exija a un usuario sacar permiso de transporte para las 6 armas que posee y no para las dos que requiere transportar. Meses más tarde en la misma AF se le exige sacar este mismo transporte, ahora si para dos armas, pero se le obliga a señalar cuales de esas seis armas transportará. Siendo que el reglamento señala que puede transportar cualquiera de las seis siempre que no transporte más de las que señala el permiso.

En la AF de Concepción, una de las más complicadas por decir lo menos, cuando un ciudadano quiso inscribir un arma y presento sus liquidaciones de sueldo, le objetaron el costo del arma, que era mayor a su remuneración y tuvo que inscribir una de menor valor. Pero además, cuando le hicieron comprobación de domicilio, el conserje señalo que el departamento se encontraba sin moradores en ese momento. El resultado es que le rechazaron la inscripción porque no vivía en el domicilio que señalo y porque su remuneración era más baja que el valor del arma que deseaba inscribir. Lo insólito es que emitieron la resolución N°9000/06 y lo notificaron personalmente en el mismo domicilio en el que señalan que no vivía.

 Estas insensateces son cosa de todos los días, demasiado frecuentes y ya marcan un comportamiento sostenido, con la clara la intención de desarmar a la población.

Las actitudes del nuevo director de la DGMN nos dan algo de esperanza. Pareciera ser que en el prevalece la legalidad y el apego a la normativa, aunque actualmente es una muy mala normativa. Pero, al menos existe una norma a la que atenernos y basarnos, y no esta suerte de tómbola con las que nos sorprenden cada vez que queremos hacer un trámite en las AAFF.

Ya escribiremos más de los desaciertos de las AAFF, podríamos escribir una colección de varios tomos con aquello.

Hoy queremos agradecer al director Jorge Hinojosa Riquelme, por su gestión clara, rápida y apegada a la norma, algo que no veíamos desde hace mucho tiempo en sus antecesores. Esperamos que esta sea la marca de su gestión y que ayude a borrar la mala impresión que se tiene de lo que sucede al interior de esa repartición pública. Sabemos que no es fácil, son muchos los funcionarios enquistados ahí y que durante muchos años han intentado desarmarnos, no sabemos con qué fines, más que congraciarse con gobiernos anti-armas y mantener sus espurias regalías. Nosotros, como lo hemos hecho desde hace 17 años, seguiremos denunciando cada una de las irregularidades, por mínima que sea. No puede ser que aquellos que nos fiscalizan y controlan para que cumplamos la ley, falten a la legislación.




SOBRE INSTRUCTORES Y EVALUADORES

El miércoles 14 conocimos la Resolución Exenta N°000318 de la Dirección General de Movilización Nacional, DGMN. En ella se fija el mecanismo para que los instructores, que impartirán los cursos de acreditación que determina la Ley de Control de Armas y Explosivos, se inscriban y acrediten. Ocho son los puntos del RESUELVO de esta resolución exenta, los 7 esenciales son:

  1. Para cumplir el requisito de la letra l) del artículo 98 F del Reglamento de VISTOS 4, los interesados en desempeñarse como instructores de tiro deberán rendir una prueba práctica ante la DGMN.
  2. Esta prueba práctica consistirá en la exposición de una sesión de capacitación teórica, en alguno de los contenidos que el interesado impartirá como instructor de tiro, ante una comisión evaluadora.
  3. La comisión evaluadora estará integrada por: el Jefe del Departamento de Control de Armas de la DGMN; y 02 integrantes de este Departamento que cuenten con las características necesarias para desempeñar estas funciones. Además, podrá asistir como concurrente, un delegado del Centro de Tiro del Ejército, como asesor a la evaluación.
  4. La exposición será de carácter pública y tendrá una extensión de hasta 20 minutos. El contenido de la capacitación teórica será dispuesto por la DGMN.
  5. Los interesados en rendir la prueba práctica, deberán inscribirse en la página web de la DGMN entre los días 1 a 5 de los meses marzo y septiembre. La DGMN posteriormente informará los días y horarios en que se rendirán las pruebas, las que se fijarán para los meses abril y octubre respectivamente.
  6. La aprobación o reprobación de la prueba práctica será comunicada al interesado a continuación de su exposición. Posteriormente se entregará el certificado correspondiente.
  7. Ante reprobación, el interesado podrá inscribirse y presentarse para rendir la prueba práctica, en el proceso evaluativo siguiente.

Se cumple, sin duda alguna, con el objetivo de comunicar lo que la DGMN ha resuelto. Pero nuestro análisis va un poco más allá, nos preocupan y llaman la atención algunos temas no menores.

Como ya hemos dicho en numerosas ocasiones el artículo 98F es otro más de los artículos del reglamento complementario que se contradicen dentro del mismo artículo. Efectivamente, al enumerar los requisitos que deberán cumplir quienes deseen registrarse como instructores se menciona: “l) Rendir ante la DGMN una prueba para acreditar sus conocimientos o experiencia como instructor de tiro.”. Pero inmediatamente después señala que los antecedentes requeridos deberán ser presentados en la Autoridad fiscalizadora, AF, de su domicilio. No siendo esto suficiente señala en el inciso siguiente: “Verificada la conformidad y suficiencia de la información, con los antecedentes aportados u otros que fueren requeridos o consultados, la A.F. remitirá copia de todos ellos por medios electrónicos a la DGMN, con objeto que se realice la inscripción del solicitante en el registro de instructores de tiro.”, dejando claro que son las AAFF las que determinan quienes cumplen los requisitos y la DGMN sólo debe realizar la inscripción en el registro de instructores. Estamos ante otra contienda de atribuciones entre la DGMN y las AAFF en manos de Carabineros.

Además, señala la resolución, en su punto 3, que habrá una comisión evaluadora ante la que cada postulante deberá exponer en 20 minutos el contenido de su capacitación. Debemos concordar en que en un lapso de 20 minutos solo se podrá exponer el temario de esta capacitación, que el mismo reglamento complementario fija en un mínimo de 4 horas cronológicas y menciona los contenidos mínimos que deberá incluir:

  1. Medidas de seguridad para uso de armas.
  2. Conocimiento y funcionamiento del tipo de arma que se desea inscribir.
  3. Manipulación del arma, carga, descarga, atascos.
  4. Fundamentos del tiro.
  5. Mantenimiento del arma a nivel usuario.
  6. Medidas de seguridad y conservación en el almacenamiento.
  7. Práctica de tiro.
  8. Primeros auxilios.

En definitiva, un promedio de 30 minutos por tema, insuficiente a criterio de muchos y carente de temas fundamentales como legítima defensa y legislación vigente. Y donde sobra el tópico sobre primeros auxilios, ya que en la práctica no se registran accidentes con armas de fuego legalmente inscritas en manos de civiles. Otra cosa son las armas en manos de FFAA y policías, donde sí existen incontables casos de tiros escapados y heridos productos de estos “descuidos”, que en el mundo civil no se producen.

Sin bastar con esto se señala que la comisión evaluadora estará compuesta por:

  • Jefe del Departamento de Control de Armas y Explosivos, DCAE.
  • 2 integrantes del DCAE que cuenten con las características necesarias.
  • Un delegado del Centro de Tiro del Ejército, en calidad de asesor.

Históricamente el jefe del DCAE ha sido un militar, excepto en un oscuro periodo que estuvo a cargo de funcionarios de Carabineros. Casi todos coroneles en retiro que fueron reincorporados, todos ligados al área de inteligencia. Los jefes del DCAE militares han sido oficiales activos, pero sin ninguna especialización y la verdad sin ningún grado de dominio sobre el mundo de las armas en manos de civiles. No conocemos el perfil del nuevo jefe del DCAE, pero tendría que ser excepcionalmente distinto a los anteriores para poder tener las aptitudes necesarias para evaluar a un instructor de tiro y el manejo del temario. En el círculo militar se les dice que pasan a “complemento” cuando son designados en estos cargoS, algo así para incrementar la pensión del retiro.

En los años que nos ha correspondido interactuar con el DCAE de la DGMN, no hemos visto personas “con las características necesarias para desempeñar estas funciones” en una comisión evaluadora, que determinará quienes podrán hacer instrucción en: manejo seguro de armas de fuego; conocimiento y funcionamiento de armas de fuego; manipulación de armas, carga, descarga, atascos; fundamentos del tiro; mantenimiento del arma; medidas de seguridad y conservación en el almacenamiento; y mucho menos práctica de tiro.

¿Como los integrantes de esta comisión evaluadora demostrarán que poseen los conocimientos necesarios?, ¿Exhibirán diplomas, certificarán cursos, diplomados, maestrías, etc.? En definitiva, ¿Quién evalúa a los evaluadores? ¿O basta con que digan “yo sé”?

¿Y porque sólo militares en la comisión? Acaso las otras ramas no están capacitadas. O lo que no es menor, ¿Estamos enfrentando una militarización del tiro deportivo, de la caza y la colección? En definitiva, una militarización de las armas de fuego en manos de civiles. No contentos con dictar normas militares para nuestros campos de tiro, hoy además nos quieren señalar cómo y qué debemos enseñar a quienes se inician en el tiro en Chile. ¿A nosotros, a los que poseemos años de práctica y armas que muchos de los integrantes de FFAA y policías no han visto y mucho menos disparado en su vida? ¿A nosotros, están hablando en serio?

Además, se señala que solo se podrán inscribir postulantes los primeros 5 días de cada mes entre marzo y septiembre, ¿pero habrá disponibilidad siempre para la inscripción? ¿por qué no permitir que se inscriban durante todo el mes? y ¿por qué en la DGMN y no en la AF como señala el reglamento? Luego establece que las pruebas se rendirán en abril y octubre, ¿Pero porque no todos los meses? y ¿qué sucederá con los instructores de regiones, deberán viajar o la comisión irá a cada región?

Como siempre, cada vez que se trata de la DGMN, las AAFF y sus peculiares interpretaciones de la ley y sus más extrañas implementaciones de la ley, quedan más dudas que certezas en todo.

Sin lugar a dudas, esto puede parecer un mal chiste. Pero no lo es, nuestra propuesta de siempre fue que los clubes y federaciones, con décadas de experiencia, fueran los encargados de diseñar e implementar estas capacitaciones. Deportistas, que respaldados por su club y su federación serían los instructores. Donde el presidente del club fuera quien certifica los contenidos entregados y la aprobación del curso. Donde uno o más instructores se encargarán de distintos módulos: Fundamento del tiro, balística, legislación, casos de error, manejo seguro, etc. Es decir, aquello que aplicamos día a día en nuestros clubes, lo que ponemos en práctica cada vez que recibimos a un socio nuevo, cómo lo evaluamos, como lo educamos en el mundo de las armas, como lo aconsejamos. Nosotros, los que sabemos de armas en Chile.

Pero no, se optó por la vía de mercantilizar el acceso a las armas por parte de civiles, armar un negocio que derechamente beneficiará solo a unos pocos y perjudicará a cientos de miles de propietarios de armas de fuego, que hoy deberán encarecer su legítimo derecho a poseer armas, tal como garantiza nuestra Constitución. Un derecho que hoy subirá de precio.

Quienes practicamos deporte, caza y coleccionamos armas sabemos más de armas que cualquier comisión integrada por uniformados o personal de la DGMN y las AAFF, eso es una verdad irrefutable y lo podemos demostrar en cualquier situación, ahora y mañana.

Pero, ¿sabe la ministra de defensa y/o la ministra de interior de estas medidas y de las interpretaciones que hacen de la Ley?, ¿sabe el comandante en jefe del ejército lo que hace su personal en la DGMN?

Pareciera que no tienen idea de lo que sucede en los organismos que de ellos dependen, porque si por el contrario lo saben, autorizan y avalan, estamos frente a responsabilidades políticas claramente delimitadas.

Hoy, en definitiva, se le entrega el poder a militares que están esperando el retiro y a funcionarios que poco saben del tema, los mismos que fracasaron 3 o 4 veces en la implementación del Reglamento Complementario, cometiendo errores que nosotros relevamos en su oportunidad.

Es la supremacía de los cogote pelado…

Cristian Gamboa Beltramín

ANTRA Chile